El vuelo
Hoy es sábado 16 y
son las 13,30 cuando salimos de Bilbao hacia Madrid donde aterrizamos casi una
hora después.
Ya son las 5 y media
de la tarde cuando un Boeing 777 nos lleva hasta nuestra primera escala, Doha
Aunque lo hemos
hecho ya muchas veces, casi no me creo que nos atrevamos a viajar dentro de
esta gigantesca lata de sardinas durante un montón de horas a 940 km por hora y
con 45 grados bajo cero en el exterior. Si nos caemos desde esta altura (10.668
metros) nos damos un buen tortazo. Esto es confiar en la técnica y lo demás
cuento.
Un bocadillo es indispensable |
A la una (hora
local) y después de seis horas y media de viaje nuestra inmensa lata aterriza
en el aeropuerto Hamad de Doha. A pesar de la hora el termómetro marca 34
grados. Ni te digo el calor que hará aquí al mediodía.
Aquí toca esperar
hasta las 3,45 para tomar el próximo vuelo a Aukland.
Los rezos del
muyaidin en la tele casi te adormecen cuando ya llegó la hora del embarque en
el siguiente avión, otro 777 aún más grande. Nunca he creido útiles las
indicaciones de las azafatas en caso de accidentes pero aun así las escuchamos
más o menos atentamente y es que si somos incapaces de sentarnos ordenadamente
cuando todo está en calma, no me imagino como vamos a conseguir salir del avión en medio de
un desastre.
Por fín el avión
despega hacia Aukland, nuestro destino final. Tenemos más de 17 horas y más
14.000 Km. por delante. Navegamos a 934 K/h y a una altura de 9500 metros. Una
pesadez de viaje sino fuera por las expectativas y porque a los tres nos gusta
volar.
En España son ya las
9 y 10 de la mañana. La hora del desayuno. Mariví y yo hemos dormido unas tres
horas. Ieltxu más tiempo, quizás cinco.
El avión parece el
Nostromo con los pasajeros hibernando cuando todavía faltan 9300 km. hasta el
destino, el planeta Nueva Zelanda. De vez en cuando sale alguno de la cabina de
hibernación para ir al baño o estirar las piernas.
Nueva Zelanda, por
fín. Son las cinco de la mañana, hora local, 18,50 del día antes, hora de
Madrid; aunque con los cambios de horarios ya no sabemos si es por la mañana o
por la tarde o si es de día o de noche. Vaya cacao. Hemos viajado durante unas
treinta horas pero llegamos más de dos días más tarde.
Ahora comienza el
viaje propiamente dicho.
Auckland. Día
primero-Lunes 18
Son las seis de la
mañana cuando cogemos el autobús en el aeropuerto en dirección al centro. El
tiempo es lluvioso y no hemos tenido ningún problema para pasar la aduana. Eso
sí, conviene declarar hasta las aspirinas y el manasul. El billete del autobús cuesta
18 dólares NZ por persona.
Mientras se libera
nuestra habitación en el Jucy Snooze aprovechamos para conocer la ciudad. El
paraguas viene bien. Auckland es una ciudad de algo más de 1.200.000 habitantes,
de estilo europeo y con barrios de casas de estilo inglés
victoriano. Una
caminata nos permite visitar en una mañana casi toda la ciudad. El puerto, la
zona de la torre, el cementerio de Simons Street, el parque pukekawa, el jardín botánico donde
aprovechamos para descansar un poco y tomar un café.
Sky Towers de 328 metros. |
Después rodeamos por
el antiguo y exclusivo barrio victoriano Parnell donde son habituales los
Porsches y otros coches de alta gama. Comprobamos también que como en toda
ciudad rica también hay algún homeless.
La visita a la
oficina de turismo que aquí se llama I-Site es obligada para hacer acopio de
folletos y algún mapa para planificar la ruta de mañana.
Cabe destacar la
amabilidad de los ciudadanos neozelandeses con los que nos hemos comunicado.
Esperemos que siga así todo el viaje.
Más información: https://es.wikipedia.org/wiki/Auckland
Día segundo-Martes
19
Para las siete ya
estamos tomando en la cocina de este hostel ( por cierto muy recomendable) el
desayuno que nosotros mismos hemos preparado: tostadas con mermelada y
cereales.
La autocaravana
El hombre de la caravana se retrasa debido al tráfico y a una posible avería en el vehículo que nos iba a traer por lo que nos trae otro en su lugar.
El vehículo es una campervan a estrenar por nosotros y con el doble de capacidad que la contratada en un principio.
Es una Fiat autotrail Imala para seis pasajeros con todo nuevecito de 7 metros de largo, 3,1 de alto y 2,35 de ancho. Tiene paneles solares y todo lo necesario para olvidarnos de los hoteles durante las vacaciones. Eso sí, ¡¡No tiene tele !!
Nathan, así se llama el dueño de la empresa, llega sobre las doce de la mañana por lo que tendremos que dejar para mañana alguna visita programada para hoy.
Después de la instrucciones previas, enfilamos dirección Hamilton donde dejamos a Nathan que nos invita a unas cervezas artesanas y luego hacia Otorohanga y Waitomo donde acampamos ya pasadas las seis de la tarde y a punto de anochecer.
El camping resulta ser un site despoblado, excepto por tres originales sitios para dormir, y sin energía en los enchufes.
Un avión utilizado en la guerra de Vietnam, un vagón de tren y un barco sirven de hospedaje a los que no tienen caravana.
Mañana será otro día.
Kilómetros 754-567………… 187 Km.
Día tercero-Miercoles 20
Nos levantamos a las seis y media, desayunamos y para las siete ya estamos en marcha. Hace un sol espléndido y la escarcha en los campos indica que hace bastante fresquito.
Lo primero que visitamos son las cataratas Marokopa Falls en un entorno de bosques con especies que nunca habíamos visto y seguido nos dirigimos a Waitomo a visitar unas cuevas únicas en el mundo.
La particularidad de la cueva Waitomo es que dentro de ellas viven unas luciérnagas cuyos gusanos, que son las larvas del mosquito del hongo, emiten una luz que atrae a los insectos que les sirven de alimento iluminando los techos de la gruta, haciendo parecer que vemos el cielo estrellado desde la barca que navega por un río interior de quince metros de profundidad.
Son las 11 cuando nos dirigimos hacia Otorohanga para visitar Kiwi house, un pequeño zoo donde viven unas cuantas especies de pájaros autóctonos y sobre todo el Kiwi que es nocturno y apenas se deja ver. La verdad es que fue un poco decepcionante ya que solo vimos uno y con dificultad por la oscuridad del entorno en el que viven.
Sin embargo no nos acobardamos y seguimos camino hacia el plato fuerte de hoy: Hobbitón, la aldea donde se filmaron el señor de los anillos y el Hobbit.
Cuando los buscadores de localizaciones para el rodaje encontraron la espectacular granja de la familia Alexander llena de vacas y ovejas en la localidad de Matamata descubrieron el escenario perfecto para las películas, un sitio idílico propio de un cuento pero real. Se tarda dos horas en visitarlo.
Son ya las 15,45 cuando nos dirigimos hacia Rotorua donde después de informarnos en el site de turismo de lo que hay que ver aquí vamos hacia el lugar donde aparcamos para pasar la noche, un freecamp al lado del lago Rotorua
El blogero gruñon:
Hay que ver lo que huele a azufre en este pueblo. Debemos tener debajo un volcán en actividad. O, como dijo alguien, el diablo ha estado aquí.
Kilometros: 246
Día cuarto-Jueves 21
Diana a las seis. Desayuno y salida del aparcamiento.
Nos acercamos a por provisiones y a la Dump Station para poner la caravana a punto. Lluvioso, 11º C.
Rotorua está llena de géiseres y fumarolas y tenemos cerca un volcán aun activo, el Whakaari que esperamos que no se enfade.
También nos hemos apuntado a ver un espectáculo de la cultura maorí y a visitar un bosque de sequoias.
Bosque de Whakarewarewa.
Te Puia
Hells Gate (Puerta del infierno )
Mitai (Espectáculo Maorí)
Es un espectáculo muy útil si se quiere conocer un poco de la cultura maorí. Sus costumbres, danzas y juegos, seguido de una comida preparada con el calor que sale de la tierra.
Kilómetros: 60 Km.
El bloggero gruñón:
Somos del norte y nos gusta la lluvia pero esto es pasarse. No ha parado de llover en todo el día. Lo bueno de hoy es que hemos descubierto de donde sale el olor a azufre.
Día cinco-Viernes 22
Hoy diana a las 6,15.
Hay una lavandería cerca del caravan park así que aprovechamos para hacer la colada. La higiene fundamental, je,je.
Son las 10,15 cuando llegamos a Wai-o-Tapu.
El paisaje hasta ahora es un paisaje como de cuento. Hasta las vacas parecen colocadas en los inmensos prados de un verde intenso y los caballos tapados con una manta. ¿Se enfriarán?. Los bosques de pino no tienen Procesionaria en absoluto y todos los prados incluidas las cunetas están perfectamente segadas.
Wai-o tapu es el área más grande de actividad termal en la zona de Taupo. La región está cubierta por cráteres derrumbados, piscinas de agua y barro hirviendo y por fumarolas de vapor. En el área se observan zonas de colores que según los carteles informativos corresponden a diversos elementos químicos como azufre, hierro, antimonio, arsénico, etc.
Después de visitar Wai-o-Tapu a eso de las 11,45 salimos hacia Orakei Korako la terraza de sílice más grande del mundo.
Se accede al sitio cruzando el lago Ohakuri, “Kakariko” en Maorí. Es un lugar apartado con muy pocos turistas y que merece la pena visitar.
Antes de llegar a Taupo en la zona de Wairakei forest , visitamos los cráteres de la luna ( Craters of the moon) que es una zona con cráteres geotérmicos de formación reciente (1983 y 2002).
Rodeamos el lago Taupo hasta llegar a Oruatua, un pequeño lugar mágico a orillas del lago donde podemos aparcar la caravana para pasar la noche y que nuestro chofer lo encuentra como por arte de magia ya que no tenía ningún cartel que lo indicase.
Procuramos evitar todo lo posible los campings de pago y no es por tacañería sino porque con nuestra casa rodante somos lo bastante autosuficientes.
Desde donde estamos se divisa a lo lejos el volcán Tongariro , donde se rodó Mordor en el Señor de los anillos.
Hoy el tiempo ha acompañado y nos ha permitido ver las cosas con más tranquilidad y con la ropa seca.
Kilómetros: 160 Km.
Ver fotos (Wai o Tapu, Orakei Korako, Crateres de la luna)
Antes de recoger la
caravana volvemos a pasar por el super para comprar algunas cosillas más. (verfotos)
La autocaravana
El hombre de la caravana se retrasa debido al tráfico y a una posible avería en el vehículo que nos iba a traer por lo que nos trae otro en su lugar.
El vehículo es una campervan a estrenar por nosotros y con el doble de capacidad que la contratada en un principio.
Es una Fiat autotrail Imala para seis pasajeros con todo nuevecito de 7 metros de largo, 3,1 de alto y 2,35 de ancho. Tiene paneles solares y todo lo necesario para olvidarnos de los hoteles durante las vacaciones. Eso sí, ¡¡No tiene tele !!
Nathan, así se llama el dueño de la empresa, llega sobre las doce de la mañana por lo que tendremos que dejar para mañana alguna visita programada para hoy.
Después de la instrucciones previas, enfilamos dirección Hamilton donde dejamos a Nathan que nos invita a unas cervezas artesanas y luego hacia Otorohanga y Waitomo donde acampamos ya pasadas las seis de la tarde y a punto de anochecer.
El camping resulta ser un site despoblado, excepto por tres originales sitios para dormir, y sin energía en los enchufes.
Un avión utilizado en la guerra de Vietnam, un vagón de tren y un barco sirven de hospedaje a los que no tienen caravana.
Mañana será otro día.
Kilómetros 754-567………… 187 Km.
Día tercero-Miercoles 20
Nos levantamos a las seis y media, desayunamos y para las siete ya estamos en marcha. Hace un sol espléndido y la escarcha en los campos indica que hace bastante fresquito.
Lo primero que visitamos son las cataratas Marokopa Falls en un entorno de bosques con especies que nunca habíamos visto y seguido nos dirigimos a Waitomo a visitar unas cuevas únicas en el mundo.
La particularidad de la cueva Waitomo es que dentro de ellas viven unas luciérnagas cuyos gusanos, que son las larvas del mosquito del hongo, emiten una luz que atrae a los insectos que les sirven de alimento iluminando los techos de la gruta, haciendo parecer que vemos el cielo estrellado desde la barca que navega por un río interior de quince metros de profundidad.
Son las 11 cuando nos dirigimos hacia Otorohanga para visitar Kiwi house, un pequeño zoo donde viven unas cuantas especies de pájaros autóctonos y sobre todo el Kiwi que es nocturno y apenas se deja ver. La verdad es que fue un poco decepcionante ya que solo vimos uno y con dificultad por la oscuridad del entorno en el que viven.
Sin embargo no nos acobardamos y seguimos camino hacia el plato fuerte de hoy: Hobbitón, la aldea donde se filmaron el señor de los anillos y el Hobbit.
Cuando los buscadores de localizaciones para el rodaje encontraron la espectacular granja de la familia Alexander llena de vacas y ovejas en la localidad de Matamata descubrieron el escenario perfecto para las películas, un sitio idílico propio de un cuento pero real. Se tarda dos horas en visitarlo.
Son ya las 15,45 cuando nos dirigimos hacia Rotorua donde después de informarnos en el site de turismo de lo que hay que ver aquí vamos hacia el lugar donde aparcamos para pasar la noche, un freecamp al lado del lago Rotorua
El blogero gruñon:
Hay que ver lo que huele a azufre en este pueblo. Debemos tener debajo un volcán en actividad. O, como dijo alguien, el diablo ha estado aquí.
Kilometros: 246
Día cuarto-Jueves 21
Diana a las seis. Desayuno y salida del aparcamiento.
Nos acercamos a por provisiones y a la Dump Station para poner la caravana a punto. Lluvioso, 11º C.
Rotorua está llena de géiseres y fumarolas y tenemos cerca un volcán aun activo, el Whakaari que esperamos que no se enfade.
También nos hemos apuntado a ver un espectáculo de la cultura maorí y a visitar un bosque de sequoias.
Bosque de Whakarewarewa.
Un bosque enorme de
gigantescas sequoias, helechos, árboles de la menta, para pasear por él todo lo que quieras.
Nosotros hemos escogido la moderada ruta de 5 kilometros.
Bosque de Whakarewarewa. |
Un museo al aire
libre con geiseres y artesanos maoríes muy interesante de ver.
Hells Gate (Puerta del infierno )
Como su nombre
indica, el lugar está a dos kilómetros y medio por encima del magma. Pequeños
lagos de agua y barro alcanzan la temperatura de ebullición hirviendo y
ofreciendo un panorama muy interesante. Es una de las cosas más espectaculares
que hemos visto hasta ahora. En el lugar está la cascada más grande del
hemisferio sur a una temperatura de 40 grados. Todo lo que se ve burbujea y
cuando deja de burbujear ocurre un terremoto en alguna parte del mundo. Desde
este lugar se han predicho más de 35 grandes terremotos.
Puerta del infierno |
Mitai (Espectáculo Maorí)
Es un espectáculo muy útil si se quiere conocer un poco de la cultura maorí. Sus costumbres, danzas y juegos, seguido de una comida preparada con el calor que sale de la tierra.
Kilómetros: 60 Km.
El bloggero gruñón:
Somos del norte y nos gusta la lluvia pero esto es pasarse. No ha parado de llover en todo el día. Lo bueno de hoy es que hemos descubierto de donde sale el olor a azufre.
Día cinco-Viernes 22
Hoy diana a las 6,15.
Hay una lavandería cerca del caravan park así que aprovechamos para hacer la colada. La higiene fundamental, je,je.
Son las 10,15 cuando llegamos a Wai-o-Tapu.
El paisaje hasta ahora es un paisaje como de cuento. Hasta las vacas parecen colocadas en los inmensos prados de un verde intenso y los caballos tapados con una manta. ¿Se enfriarán?. Los bosques de pino no tienen Procesionaria en absoluto y todos los prados incluidas las cunetas están perfectamente segadas.
Wai-o tapu es el área más grande de actividad termal en la zona de Taupo. La región está cubierta por cráteres derrumbados, piscinas de agua y barro hirviendo y por fumarolas de vapor. En el área se observan zonas de colores que según los carteles informativos corresponden a diversos elementos químicos como azufre, hierro, antimonio, arsénico, etc.
Después de visitar Wai-o-Tapu a eso de las 11,45 salimos hacia Orakei Korako la terraza de sílice más grande del mundo.
Se accede al sitio cruzando el lago Ohakuri, “Kakariko” en Maorí. Es un lugar apartado con muy pocos turistas y que merece la pena visitar.
Antes de llegar a Taupo en la zona de Wairakei forest , visitamos los cráteres de la luna ( Craters of the moon) que es una zona con cráteres geotérmicos de formación reciente (1983 y 2002).
Rodeamos el lago Taupo hasta llegar a Oruatua, un pequeño lugar mágico a orillas del lago donde podemos aparcar la caravana para pasar la noche y que nuestro chofer lo encuentra como por arte de magia ya que no tenía ningún cartel que lo indicase.
Procuramos evitar todo lo posible los campings de pago y no es por tacañería sino porque con nuestra casa rodante somos lo bastante autosuficientes.
Desde donde estamos se divisa a lo lejos el volcán Tongariro , donde se rodó Mordor en el Señor de los anillos.
Hoy el tiempo ha acompañado y nos ha permitido ver las cosas con más tranquilidad y con la ropa seca.
Kilómetros: 160 Km.
Ver fotos (Wai o Tapu, Orakei Korako, Crateres de la luna)
Día seis-Sábado 23
Diana a las seis.
Despertamos a las
orillas del lago Taupo formado en el cráter creado por la explosión más grande
de la que hay registros, hace 26.500 años. Prueba de ello es que la orilla del
lago está llena de piedra pómez expulsada en la erupción.
Después de desayunar
partimos para el parque nacional del Tongariro donde se impone un par de horas
de senderismo por los alrededores del volcán Ruapehu el famoso monte del
destino de la trilogía de Tolkien. En las faldas del monte está el pueblo
llamado Whakapapa punto de partida de nuestra ruta. Escogemos una ruta circular
que nos lleva hasta las cascadas Taranaki que caen desde 20 metros por un
antiguo río de lava.
La carretera hasta
Wellington está bien asfaltada y se circula con poco tráfico que solo aumenta
en las pequeñas ciudades que encontramos por el camino como Ohakune, un pueblo
con una zanahoria inmensa colocada a la salida. Nos enteramos que aquí se come
zanahoria en abundancia e incluso se celebra la fiesta anual de la zanahoria.
Taihape, Sanson donde vaciamos y llenamos la caravana y Levin donde descansamos
del viaje después de repostar diésel para el vehículo que traga bastante y
comida para nosotros que tragamos menos en el supermercado Countdown.
Ieltxu y Mariví
llegan a tiempo para salvarme de una pareja que se empeña en hablar conmigo
aunque les digo que de inglés ni idea.
Una parada después
de Levin para un tentempié y hasta Wellington.
Wellington es la
capital de Nueva Zelanda y si un día llegas hasta aquí y eres aficionado al
cine no puedes dejar de visitar Weta Studios que es la factoría en la que se
realizan efectos especiales y miniaturas para un montón de películas, por
ejemplo, El Señor de los Anillos, Narnia, Distrito nueve, Los vengadores,
Tintín y muchas más.
En el Parking de
caravanas a las 18, 20, aún de día.
Kilometros: 418
El bloggero gruñón:
A las seis
de la mañana con 3 grados tocan diana y después de desayunar una tostada toca
dos horas de marcha. ¡ Menudas vacaciones!!
Menos mal
que hoy tampoco ha llovido.
Día siete-Domingo 24
Amanece día precioso en el Parking de la
marina, un aparcamiento gratuito en el puerto de Wellington.
Hoy es el paso a la isla sur pero antes aprovechamos
el último día para visitar el museo Te Papa.
El museo Te Papa es imprescindible si se está
interesado en la historia y cultura de las islas neozelandesas. Un guía que más
bien parecía un respetable profesor nos acompañó durante hora y media
explicándonos un montón de cosas sobre la colonización de Nueva Zelanda y la
repuesta de los maorís a esta invasión.
Son las 13,37 cuando los motores del Ferry se
ponen en marcha rumbo a la isla sur con nuestra caravana a bordo. Son tres
horas y media de viaje en los que nuestra logista y el chofer de la expedición
repasan la ruta de la segunda parte del viaje que tendrán que modificar una
borrasca que se nos hecha encima.
Ánimo, que desde aquí os leemos...
ResponderEliminarEskerrik asko. Un abrazo a todos
EliminarLuismi, pareces el Bill Bryson de Baracaldo, muy buen reportaje. Seguid disfrutando. Abrazos
EliminarGracia Andres, No es para tanto pero se hace lo que se puede. Un abrazo a todos.
EliminarVamos esos trotamundos, que disfrutéis. Un abrazo
ResponderEliminarA disfrutar,Koldo!!!
ResponderEliminarNo te he podido seguir el viaje porque aquí la conexión es muy difícil pero me pondré al día en cuanto vuelva a casa.
Un abrazo malgache,familia.